Terapias Artísticas y Creativas
Las terapias artísticas no buscan una perfección artística. Su enfoque principal es constructiva y reside en el desarrollo de un proceso personal y creativo, en el cual, a través de la elaboración y artística y corporal, la persona conecta con material reprimido de una manera más sutil y menos invasiva que el lenguaje verbal.
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Todo ello ofrece una vía de comunicación alternativa pera resolver conflictos internos, expresar emociones y adquirir un lenguaje y forma de expresión intuitivo, espontáneo y auténtico, creando la posibilidad de poder modificar patrones dañinos y construir respuestas alternativas a través de la creación.
A través de los medios artísticos, exploramos nuestro mundo interno, creativo y emocional y puede verse reflejado, tanto a través de su creación como de su movimiento. Estas terapias incorporan la mente, el cuerpo, el intelecto y la emoción. Los estados emocionales de la persona, raramente son lógicos; así, la utilización del lenguaje no verbal, nos ofrece una vía de exploración personal y una comunicación alternativa.
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El ser humano es, por naturaleza, un ser creativo, y a menudo, es menos amenazante crear una imagen o expresarse de manera corporal, a través de una simbología y la metáfora, que verbalizar las emociones directamente.
"Identify and get in touch with feelings, explore unconscious material, release energy, gain insight, solve problems, discover intuitive, mythological and spiritual dimensions." (Rogers, N.1993).
Movimiento Psicocorporal
Todo pasa por él cuerpo y a menudo los emociones quedan atrapados en nuestro interior. La danza es la llave que libera nuestro cuerpo emocional para cruzar la puerta hacia la liberación del ser.
Una practica intuitiva, auténtica, espontánea y liberadora que pone en moción nuestras emociones .
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El movimiento psicocorporal, es para cada persona la cual esta buscando una conexión más holística con su cuerpo energético, físico, emocional y espiritual.
A través del movimiento espontáneo, el ritmo, la respiración, la meditación, las posturas, los mudras / gestos, el sonido vibracional, la danza y el silencio, afinamos nuestro cuerpo como un instrumento divino.
Entre la disciplina y la fluidez creativa encontramos un punto de equilibrio.
Se estira, suaviza, centra y libera el cuerpo, viajamos al mundo interior para aumentar la auto-conciencia, calmar la mente y fortalecer nuestro centro vital.
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Ganar confianza, librar bloqueos emocionales y posicionarnos de una forma más estable y segura en la vida y con nosotros mismos.
En esta práctica despertamos todos nuestros sentidos y suavemente nos guía a adentrarnos en un mundo de infinitas posibilidades.
Esta forma de moverse nos desplaza a diversos estados de conciencia, que son profundamente curativas y transformacionales.
